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El tiroteo en Buffalo es el más reciente recordatorio de la necesidad desesperada de acción contra la violencia con armas de fuego

Washington DC — Hoy, al menos diez personas murieron en un supermercado en Buffalo, Nueva York, por un hombre armado con un rifle y armadura. Giffords, la organización de prevención de la violencia con armas de fuego liderada por la excongresista Gabriella Giffords, continúa monitoreando la situación. Reportes aún no confirmados de los medios sugieren que el atacante habría publicado un manifiesto supremacista blanco en redes antes de realizar el tiroteo, ocurrido en un barrio predominantemente negro. 

Excongresista Gabrielle Giffords:

“Estoy devastada y furiosa. Diez personas asesinadas y otras tres heridas mientras realizaban sus compras de fin de semana en una tienda. Once de los trece individuos que recibieron disparos eran negros, en un tiroteo que parece motivado por el odio supremacista blanco y perpetrado por un individuo que habría viajado durante horas para ocasionar esta tremenda devastación y este dolor. Para gente incitada por el odio racista es demasiado fácil tener acceso a armas de guerra y a cometer devastación a escala masiva. Nuestros líderes deben fortalecer las leyes de armas de fuego de nuestra nación para prevenir que otras comunidades a lo largo del país experimenten traumas y devastación similares”.

Testigos describen que el atacante es un hombre blanco de casi veinte años vestido con ropas estilo militar. La policía dice que el atacante, a quien identificaron como un hombre de 18 años de fuera de la ciudad, transmitió online el tiroteo en vivo. El FBI está investigando el incidente como un crimen de odio.

Asesor Senior de Giffords y ex ejecutivo de armas de fuego Ryan Busse:

“La tragedia de hoy es horrorosa, pero desafortunadamente no es sorprendente. Hace quince años, a instancias de la NRA, la industria de armas de fuego dio un giro oscuro cuando comenzó a el mercadeo de armas de fuego y equipo táctico cada vez más agresivo y militarista. Los dueños razonables de armas de fuego trataron de impedirlo, pero fueron acallados. Desde entonces la tendencia se ha acelerado y ahora se combina con políticos espantosamente extremos, cuentas violentas en las redes sociales y peligrosos hilos de comentarios. Ellos han puesto los recursos necesarios para la tragedia de Buffalo y, tristemente, de aquellas que aún están por ocurrir”.

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